Velada de pánico en Amberes

El FC Barcelona afrontaba sin presión el sexto y último partido de fase de grupos de la máxima competición europea con la búsqueda de una victoria rápida y sin complicaciones. Ni en sus peores sueños. El Amberes hizo de su estadio, el Bosuilstadion, un fortín. El equipo belga, colista del grupo H, gana su primer partido en Champions League y le asesta un severo varapalo a los de Xavi, convirtiendo el enfrentamiento en una experiencia espeluznante que desearán olvidar durante un tiempo.

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Resultado final: 3-2 favorable al Amberes. Fuente: FC Barcelona

Nada más empezar se le va de las manos el partido a los blaugranas: error de Oriol Romeu en el minuto 1 que supone el primer disgusto para la escuadra catalana. Los culés no se encontraban cómodos y la presión alta y defensa adelantada del equipo de Mark van Bommel había surtido efecto al instante propiciando un error muy tempranero en salida de balón del FC Barcelona. Es A. Vermeeren quien encuentra el premio, fruto de la presión alta y le quita las telarañas a la portería de Iñaki Peña. Un minuto le había bastado al cuadro flamenco para desgarrar al club español.

Los primeros minutos tuvieron como seña de identidad las pérdidas continuas de balón. Lewandoski, tendido a una banda, más en el costado que Ferran en los primeros minutos, salía con valentía de la presión para desreferenciar a los centrales locales, T. Alderweireld y S. Coulibaly. Poco le duraría. Su personalidad futbolística se tornó tímida y se desvaneció con el paso de los minutos, como acostumbra últimamente.

El Barça no carburaba y se notaba. Lejos de mostrar su mejor versión se precipitaba y no llevaba la iniciativa; se le olvidó a Xavi la batuta y los suyos no conseguían cogerle las riendas a un partido que empezaba a ponerse cuesta arriba. A pesar de la escasa importancia del enfrentamiento para los de Xavi, que ya tenían el pase a la siguiente fase matemáticamente asegurado, los blaugranas ansiaban conservar el poco orgullo que les quedaba tras caer derrotados 3 días antes ante el Girona en Montjuic.

De lo poco salvable del primer envite, Fermín arranca un contragolpe en el minuto 21, made in La Masía: recupera el español, se la cede rápidamente a Yamal y este se incursiona fugazmente hacia dentro, llevando a cabo dos cambios de ritmo exitosos (lo que sería un prólogo de lo que luego ocurriría) hasta que finalmente pierde el esférico. Fermín López desprendía destellos de sus botas y se consagraba como el mejor del primer tiempo (espléndido con pelota y posicionalmente); le seguía Christensen, de cerca, muy correcto en salida de balón y al corte. El tiempo pasaba y el Barça no encontraba la portería belga, parecía necesitar una brújula que consiguiera volver a ubicarles en el terreno de juego.

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Fermín López conduciendo el esférico. Fuente: FC Barcelona

El Barça comienza a articular con precisión; muestra de ello la elaborada jugada que crean entre el minuto 24 y 25. Destacable el corte de Héctor Fort, que debuta en la máxima competición continental con tan solo 17 años, con Wijndal en el minuto 32. Al joven culé se le ha visto con personalidad y no se ha achicado. Poco después llega el empate del conjunto culé, en el minuto 35, a pesar de no haber generado nada ofensivamente hasta entonces. La juventud se impone y sale a la contra Lamine Yamal; lo hace todo bien: perfila recorta y asiste para el tiburón Ferran Torres que pone las tablas a unos primeros 35 minutos asépticos. Parecía que se le cerraban las cortinas al cuadro catalán hasta que Ferran se saca un disparo certero de la manga con Mandela Keita encimándole completamente.

El gol de los visitantes, que necesitaban mejorar estrepitosamente en los segundos 45 minutos, ha sido un oasis en el partido. Han pecado de una circulación lenta, lejos de la zona de peligro haciendo que el Amberes se mantuviera crecido y mostrara personalidad. Los locales parecían verse cómodos y ya en el minuto 49 avisaban, en fuera de juego, con un zapatazo que se colaba al fondo de la red tras otro error defensivo en la zaga blaugrana. Esta vez, error de Alejandro Balde que no llega a la marca y Koundé tampoco está fino. Tres minutos después Lamine Yamal estrellaba un disparo de volea en el travesaño. No obstante, le duraría poco el empate al Barcelona. De nuevo, Oriol Romeu comete un fallo descomunal en la salida de balón. Tiene oportunidades para sacar la bola de la zona de peligro, insiste en la conducción pierde el cuero y el Amberes  lo aprovecha anotando el segundo del partido, tras un zurriagazo de V. Janssen en el 56. Ya son dos errores defensivos vitales con balón de Oriol Romeu en un partido que no es trascendente

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Oriol Romeu presionado por Mandela. Fuente: FC Barcelona

Esta puñalada para el Barça hace que Xavi mueva sus filas y se produzcan sustituciones: entran Cancelo, Gündogan y Pedri en el minuto 60. A pesar de la entrada de tres vacas sagradas, la incapacidad manifiesta de darle la vuelta al marcador era más que notoria. El equipo de Xavi lo intentaba y amenazaba sin encontrar portería. Se notó mejoría en el juego, aunque seguía sin haber espacio entre líneas. En el 72 y el 76 entran al verde Marc Guiu y Marc Casadó, para agotarle los últimos minutos al cronómetro.

Se suceden masivamente los centros en los últimos 25 minutos: todos sin rematador final. Ya en el descuento un gol balsámico de Marc Guiu rescata a los culés de la derrota: remata de cabeza viniendo desde atrás en el minuto 91. Rompiendo todos los esquemas del Barça vuelve a adelantarse el Amberes tan solo unos segundos después. Error de Koundé a quien le ganan la espalda y liquidan finalmente al cuadro catalán. Es ahora George Ilenikhena quien pone patas arriba la disputa. Ver para creer. Esto es fútbol.

Desesperación. Esa es la palabra que define el choque que nos deja la imagen de un Barça impotente, anulado por el colista de grupo. Sin duda, jarro de agua fría para los de Xavi.

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