El belga se acaba vengando de sus antiguos compañeros al ser el autor del único gol del partido, ayudando a la lucha por el scudetto de los napolitanos.
Primera parte: Dominio estéril napolitano.
El partido ya empezaba emocionante denido a que justo después de empezar, el Nápoles la tuvo en el minuto 2 con un cabezazo de Kvaratskhelia por medio de un centro de McTominay, siendo ejemplo de las intenciones que tenían los pupilos de Antonio Conte de llevarse el derby dei sole. Minutos después lo volverían a intentar con un disparo de Politano que rozó el larguero de la portería de Mile Svilar.
Aun así la Roma no se quedaría corto ya que en el minuto 18, El Shaarawy dejó un destello de clase al intentar una trivela que no pudo materializarse en un tanto, intentando buscarse la escuadra de Claudio Ranieri las habichuelas ante un Nápoles que estaba teniendo un mayor control de la posesión de la pelota.
Con el paso de los minutos, los dos equipos no encontraban esa efectividad a portería ya de que por sí venía condicionada por el dominio estéril del conjunto partenopeo, que pese a tener varios córneres seguidos para romper el empate inicial, no pudo dar recompensa en cuanto a goles a dicho dominio dando por finalizada una primera parte con poco acierto de cara al gol.
Segunda parte: Calma partenopea ante desesperación romana
Con la vuelta del descanso la Roma empezó a salir con la idea de evitar la situación de poco balón en la primera parte, cosa que el Nápoles no lo facilitaría. Para más inri la escuadra azzurri se adelantaría en el minuto 53 por obra de Romelu Lukaku que aprovecharía un error defensivo para empujar el balón a la portería, recompensando así la superioridad napolitana.
Pese al gol de Lukaku, los giallorossi se intentarían recomponer con un desafortunado disparo que tuvo Tommaso Baldanzi en el minuto 57 mandándola por encima del travesaño de Alex Meret. Lo volvería a tener el equipo romano en el minuto 65 con un cabezazo de Cristante que se iba al larguero evitando así el empate.
El final del encuentro se iba acercando y la Roma intentaba desestabilizar a la defensa napolitana quién ya veían cerca una nueva victoria. Sin embargo, la escuadra de la Campania intentaba anotar el 2-0 para sentenciar el partido cosa que lo vería cerca con un cabezazo de Folorunsho en el minuto 86 que se acababa desviando por la izquierda de la portería romana.
En el descuento David Neres tuvo en sus manos un remate que se desvió por uno de los laterales de la portería romanista aunque no serviría ya de mucho ya que al final el Nápoles consigue los tres puntos en su feudo y hunde más a la Roma que no levanta cabeza ni con la llegada de Ranieri.
Ficha Técnica:
Nápoles (4-3-3): Meret; Olivera, Buongiorno, Rrahmani, Di Lorenzo; McTominay, Lobotka, Zambo Anguissa (Folorunsho 86′); Kvaratskhelia (Neres 67′), Lukaku (Simeone 79′), Politano (Mazzocchi 86′).
Roma (4-4-1-1): Svilar; Angeliño, Ndicka, Mancini (Dybala 88′), Çelik (Abdulhamid 78′); Pisilli (Dahl 78′), Cristante, Koné, El Shaarawy (Hummels 46′); Pellegrini (Baldanzi 46′); Dovbyk.
Autor del artículo: Marcos Iglesias Rodríguez.
Aspirante a periodista, fan de los deportes de motor además de ser seguidor de AS Roma y del Real Valladolid.