Alavés: anatomía de una caída

El equipo vasco se encuentra ahora mismo en una situación delicada, con seis derrotas en los últimos siete partidos ligueros

 

Un mercado ajetreado

El Deportivo Alavés acabó la temporada pasada consolidándose como uno de los equipos revelación de la categoría, con un merecido décimo puesto y una salvación más temprana de lo esperado, pese a contar con uno de los presupuestos más bajos de la competición. 

 

Los problemas llegaron junto al mercado estival, ya que el buen curso del equipo se vio reflejado en la cantidad de jugadores clave que se despidieron en estos meses, tales como Samu, Rafa Marín, Javi López, Rubén Duarte, Gorosabel, Rioja, Simeone o Sola, entre otros. Pese a que el club supo moverse muy bien en el mercado, con fichajes como Manu Sánchez, Novoa, Jordán, Stoichkov, Toni Martínez, etc… tal cantidad de pérdidas necesitan tiempo para ser reemplazadas.

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Manu Sánchez en su presentación como nuevo jugador del Alavés. Fuente: LaLiga

Un comienzo por encima de las expectativas

Aún a sabiendas de que el equipo había sido bastante alterado, los pronósticos situaron al conjunto vitoriano en una cómoda mitad tabla. Predicción que se está cumpliendo, al ubicarse en la decimoquinta posición. Lo que pocos esperaban fue el flamante inicio liguero del equipo, que en la jornada seis reposaba en sexta posición, a tan solo dos puntos de los puestos Champions. Un Carlos Vicente estelar, sumado a un gran Sivera y un conjunto peleón hacían del Alavés un equipo difícil de batir. Hasta que llegó el partido en el Bernabéu.

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Tenaglia regateando a Darder. Fuente: Deportivo Alavés

 

El bajón

Si jugar jornada intersemanal ya es suficiente duro de por sí, imagina añadirle uno de los campos más temidos de Europa. Ese día Luis García Plaza optó por una alineación plagada de no habituales en un partido que el Real Madrid parecía tener completamente dominado, pero que se torció con dos expulsiones perdonadas al equipo blanco y dos goles del Alavés en dos minutos. Aún así, el cuadro babazorro se fue de vacío tras no poder remontar los tres goles iniciales de los locales.

 

El partido siguiente, frente a un Getafe que no conocía la victoria, finalizó con un justo dos a cero a favor de los madrileños. Tres derrotas más siguieron acechando al equipo vasco, que vió como el Barcelona (0-3), el Real Valladolid (2-3) y el Rayo Vallecano (1-0) se aprovechaban de su mala racha. La falta de todo lo que emanaba anteriormente el cuadro blanquiazul (solidez defensiva, el disputar los partidos sin importar el rival,…) evidenciaba las carencias con el paso de los partidos.

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Toni Martínez rodeado de jugadores rivales. Fuente: Deportivo Alavés

 

¿Ahora qué?

Y cuando parecía que el conjunto vitoriano comenzaba a resurgir, con dos victorias consecutivas, el Villarreal arreó otro mazazo con un contundente tres a cero. Aun así, no parece que haya dudas con la continuidad de LGP como técnico, y se espera que en los próximos encuentros el equipo consiga darle la vuelta a la tortilla para volver a la senda de la victoria.

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