El Atleti apisona a la U.D. Las Palmas con una manita histórica en el Metropolitano jugando con el equipo suplente y pone en alerta al Inter de cara al martes
Un Correa que aparece tras una larga sequía y un Marcos Llorente polivalente, que juega de defensa, mediocampista o delantero, dieron alas a un Atleti que hace una semana parecía derrotado.
Un Atlético de Madrid demoledor
El conjunto colchonero marcó 5 goles en 7 tiros a puerta, uno de los mejores registros de toda la temporada. Llorente, que empezó el partido como delantero, marcó los dos goles de la primera parte gracias a dos errores de la defensa amarilla.
El madrileño parece acatar siempre las órdenes del Cholo a la perfección, pues juega dónde el entrenador le diga y cumple en todas las posiciones del campo, tanto de carrilero, de interior o de delantero centro.
Al Atleti no le hizo falta tener el balón, con tan solo un 28% de posesión en el primer tiempo logró tener encarrilado el partido desde el minuto 20.
La segunda parte, la guinda del pastel
En la segunda parte fue Angelito Correa quien apareció tras 8 partidos sin ver puerta en liga, una racha que finiquitó con un golazo de volea y un penalti sobre Lino que acabó estrellándolo en la escuadra izquierda de la portería.
Correa dio alas al Atleti, sus movimientos y pases facilitaron el buen funcionamiento del equipo, fue partícipe en 4 de los 5 goles generando el error en el primero, robando y asistiendo en el segundo y marcando el tercero y el cuarto.
Si el Cholo recupera su mejor forma, el Atleti podría volver a tener el revulsivo estrella que tanto tiempo lleva buscando.
Memphis marcó el quinto a pase de Riquelme.
A tener en cuenta
Gran trabajo del equipo en general, desde la portería hasta la delantera. El 5-3-2 funcionó a las mil maravillas y la presión alta terminó de asfixiar al equipo canario.
El tener la posesión del balón no es tan importante como la efectividad, y así lo demostró el conjunto colchonero, pues con tan solo un 35% de posesión consiguió jugar a un mejor fútbol que su rival.
El contraataque, un arma que gracias a la velocidad de Marcos Llorente y Memphis, y a la agilidad de Correa, pudieron llevar a cabo a la perfección.
Marcos Llorente puede jugar donde el equipo le necesite, el Cholo debe saberlo y en contextos de partido de presión alta puede servir para tener un pulmón inagotable arriba. La polivalencia escenificada.
Periodista.
Especializado en el Club Atlético de Madrid.