En recuerdo de Alfonso Aparicio, una de las mayores leyendas del Atlético de Madrid y el cromo más buscado por los niños en la posguerra
En los anales del fútbol español, el nombre de Alfonso Aparicio Gutiérrez, conocido cariñosamente como Aparicio, resuena como un icono del Atlético de Madrid y un defensor inolvidable en la historia del deporte. Nacido el 14 de agosto de 1919 en Santander, su legado perdura como un testimonio de dedicación, pasión y éxito en el mundo del fútbol.
Aparicio, el futbolista con más ligas en la historia del Atlético de Madrid, con cuatro, se convertía en uno de los primeros ídolos en una época en la que el fútbol solo se veía en directo en el NO-DO. En las colecciones de cromos de entonces, el suyo era de los más buscados por los niños en los años 40 y 50.
Futuros futbolistas como Miguel González, Paco Gento y hasta un joven Vicente Calderón lo tenían como su primer ídolo.
Trayectoria en el Atlético de Madrid: Un Vínculo Indisoluble
Aparicio comenzó su carrera en el fútbol jugando en equipos de Cantabria como Daring, Magdalena y Juventud. Sin embargo, al finalizar la Guerra Civil española, en 1939, se unió al Atlético de Madrid, conocido por aquel entonces como Athletic Aviación, y su vida tomó un cambio significativo. Este marcaría el comienzo de un vínculo inquebrantable que persistiría durante doce temporadas.
En el Atlético de Madrid, Aparicio dejó una marca indeleble, contribuyendo a la obtención de cuatro campeonatos de Liga y dos trofeos previos a la actual Supercopa: la Copa de Campeones de España y la Copa Eva Duarte. Aparicio es reconocido como el jugador que más títulos de Liga ha ganado en la historia del club.
Su contribución fue más allá de la cancha, ya que después de retirarse en la temporada 1951/52, Aparicio mantuvo su relación con el Atlético. Tras trabajar como entrenador en el Boavista FC y otros equipos, regresó al Atlético de Madrid, donde ocupó el honorable cargo de delegado de Campo hasta su jubilación.
Selección Nacional
Aparicio fue un emblema del Atlético de Madrid y un destacado jugador de la Selección española. Debutó en 1945 y jugó en ocho partidos, dejando una marca indeleble en la historia del fútbol nacional.
La intensidad de la competencia se podía ver en sus entrenamientos con la selección, que contaba con humor y nostalgia. Recuerda con picardía sus peleas con jugadores como Zarra, pero su respeto y admiración eran para jugadores como Pahiño, cuyas habilidades desconcertantes desafiaban incluso a un defensor tan sólido como él.
Legado y Adiós al Fútbol
Después de jugar en el Boavista portugués, Alfonso Aparicio Gutiérrez anunció su retiro oficial del fútbol en activo. Sin embargo, su legado va más allá de las estadísticas y los títulos. Jugó en 260 ocasiones con el Atlético de Madrid y marcó cuatro goles. Uno de esos goles quedó en la memoria de los seguidores en un emocionante empate contra el Athletic Club en 1950.
Aparicio vivió y participó en las transformaciones del fútbol español, desde los años difíciles de la posguerra hasta las gloriosas victorias. Gracias a él, el Atlético de Madrid forjó su identidad y se consolidó como uno de los equipos más destacados del fútbol español.
El legado de Alfonso Aparicio Gutiérrez perdura en las páginas doradas de la historia del Atlético de Madrid, recordando a los aficionados y a las generaciones futuras la pasión, el sacrificio y la grandeza que representa ser parte de un club que va más allá del terreno de juego.
Periodista.
Especializado en el Club Atlético de Madrid.
Por circunstancias de la vida, viví en Madrid unos años (1944 a 1948). Mi padre aficionado al fútbol, me llevaba a los partidos. Y yo, cómo aficionado a coleccionar cromos, tuve, seguramente, el de tú padre.
Fue una persona excepcional tanto a nivel profesional como deportivo. Me siento orgullosa de ser su hijo