El Barça se medirá al rival más duro del bombo 4, un Newcastle United que mantiene el bloque de temporadas anteriores y que se hace fuerte en casa
Disposición táctica y temporada
Eddie Howe es un entrenador británico que apuesta por la presión alta y el fútbol directo. Con su tradicional 4-3-3, busca imprimir un ritmo infernal a los encuentros para acabar superando a sus rivales gracias al fondo físico de sus jugadores. Prueba de ello es el partido frente al PSG hace dos ediciones de Champions, en el que pasaron por encima del conjunto de Luis Enrique. St. James’ Park es un estadio que aprieta de lo lindo y sabe jugar su papel de local, más aún en competición europea.
El inicio no ha sido el mejor para las urracas, con una victoria en cuatro partidos. Esta mala racha puede deberse a la incertidumbre que ha rodeado al club durante el período de traspasos, con el culebrón de Isak y refuerzos que llegaron en los últimos momentos.

Portería: un gigante de dos metros
Nick Pope es indiscutiblemente el portero titular de los Magpies, un guardameta caracterizado principalmente por su envergadura. Se trata de la cuarta temporada en el club de un portero hecho a la antigua usanza; juego de pies bastante débil y cómodo bajo palos. Combina grandes actuaciones con paradones gracias a sus reflejos felinos, con partidos marcados por errores garrafales. Su irregularidad es su mayor defecto.
Defensa: solidez inglesa
El Newcastle formará con una línea de cuatro en la que destaca la importancia de los laterales por su proyección ofensiva. Por la izquierda Tino Livramento y por la derecha un viejo conocido del fútbol español, Kieran Trippier. El ex del Atlético de Madrid es el encargado de lanzar el balón parado, aunque sufre alguna carencia defensiva. En cuanto a los centrales, a pesar de la incorporación de Malik Thiaw, Dan Burn y Fabian Schär son la dupla de la que más se fía el técnico inglés. Dos jugadores contundentes y con gran juego aéreo, que puede suponer una amenaza para el conjunto culé. El Newcastle sólo ha encajado gol en uno de los cuatro partidos oficiales que ha disputado en la presente temporada (en la derrota por 2-3 frente al Liverpool), lo que habla muy bien de la solidez de su zaga.

Centro del campo: clase mundial
La parcela más potente de este Newcastle es el mediocampo. Las inversiones millonarias del jeque Saudí han surtido efecto y ha conformado uno de los centros del campo más potentes de la Premier League. Bruno Guimaraes, Sandro Tonali y Joelinton dominan tanto el juego directo como el posicional, aunque suelen hacer valer más su físico que su capacidad técnica. Debido a la lesión de Jacob Ramsey, los cambios en esta parcela del campo bajan mucho el nivel.
Delantera: una amenaza alemana
Las urracas no están acertadas de cara a gol en este inicio de temporada. Una razón puede ser la tardía incorporación de Nick Woltemade. El aritete alemán de 1,98 es un delantero moderno que tiene problema en retrasar su posición para asociarse y es el principal argumento ofensivo de los ingleses. En las bandas, las opciones se multiplican entre nombres como Anthony Gordon, Harvey Barnes, Jacob Murphy y Anthony Elanga. Todos ellos son jugadores verticales y veloces, aunque erráticos de cara a puerta.


Burgalés, estudiante de Periodismo en Valladolid
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