Un mal primer tiempo del Real Valladolid le da la salvación a un Osasuna que se mete en la pelea por Europa. Ni el Domingo de Resurrección fue suficiente para revivir a un equipo que está muerto y sin ninguna esperanza
El partido que abría el Domingo de Resurrección en la Liga se celebraba en Zorrilla a la misma hora que la procesión, lo que dejó las gradas prácticamente vacías. La mala situación del equipo y el horario no animaba a que nadie subiera a Zorrilla y al final se vivió la peor entrada de toda la campaña. Y los abonados que asistieron hasta Zorrilla pudieron ver uno de los partidos más potables del equipo en las últimas jornadas con 2 goles anotados. Osasuna logra su salvación contra un Pucela combativo, que tiene el descenso matemático visto para sentencia.
Una primera parte de Penitencia para el Real Valladolid
Comenzaba el encuentro en Zorrilla con un ambiente muy frío y con la peor entrada de la temporada. Osasuna no tardaba en generar peligro y un centro envenenado de Bretones apunto estaba de ser el 0-1. Y momento seguido llegarían los primeros pitos. Los rojillos dominaban el encuentro, pero no todo eran buenas noticias pues Moncayola se marchaba lesionado. El asedio pamplonica era importante y en uno de los múltiples centros de Rubén García llegaría el gol. Aimar Oroz conducía solo y le dejaba el balón a un Rubén García que se la ponía en la cabeza de un Budimir que remataba solo poniendo el 0-1.
El Real Valladolid seguía cargando su cruz y eso que ya se ha acabado la Semana Santa, pero intentaba levantarse mientras Osasuna miraba sin temor los intentos de ataque pucelano. Osasuna cuando quería jugar generaba mucho peligro y en una jugada por la derecha metían el segundo. Pablo Ibáñez se iba por la banda y se la dejaba para un Areso que llegaba a línea de fondo metiendo un centro entre portero y defensa que nadie despejaba y que remataba solo en Rubén García para poner el 0-2.
Una segunda parte loca en Zorrilla deleita a los doce mil espectadores
En la segunda parte Álvaro Rubio movía el banquillo dando entrada a Sylla y a Iván Sánchez. Los cambios le daban un nuevo aire al Pucela y Osasuna sufría. Primero la tuvo Sylla aprovechando una pérdida de Aimar Oroz y finalmente a la carrera llegaría el 1-2. Moro se iba en carrera de Boyomo y metía en el partido al Real Valladolid. Arreaba el Real Valladolid, pero tras 10 minutos Osasuna reaccionaba. Y los rojillos conseguían premio con un penalti absurdo de Latasa sobre Cayena. Budimir se preparaba desde los once metros y engañaba a André Ferreira para poner el 1-3.
Y al poco, Sylla caía en el área rojillo tras una entrada a destiempo de Herrando y Gil Manzano pitaba la pena máxima. Y el mismo Sylla se encargaría de convertirla. Habia partido en Zorrilla. Un nuevo balón a la espalda lo ganaba Sylla y un colosal Sergio Herrera evitaba el gol. Los rojillos volvían a coger el mando del partido, pero el Real Valladolid seguía intentándolo. El Pucela moría en la orilla, mientras que Osasuna con estos nuevos 3 puntos se mete en la lucha por Europa.
Artículo publicado por Mario Casado
Soy un joven estudiante de periodismo, apasionado por el fútbol y el Real Valladolid.