FC Barcelona y Atlético de Madrid se midieron hoy, en el Estadi Olímpic de Montjuïc, en el partido correspondiente a la ida de las semifinales de la Copa de Su Majestad el Rey, con un resultado de 4-4
11 culé: Szczęsny; Koundé, Cubarsí, Íñigo Martínez, Balde; De Jong, Pedri; Lamine Yamal, Dani Olmo, Raphinha; Ferrán Torres. DT: Hansi Flick (4-2-3-1).
11 colchonero: Musso; Llorente, Giménez, Lenglet, Javi Galán; G. Simeone, De Paul, Barrios, Gallagher; J. Álvarez, Griezmann. DT: Diego Simeone (4-4-2).
PRIMERA PARTE
El partido comenzó movido, con un remate de cabeza de Julián Álvarez a centro de Griezmann. A duras penas Szczęsny consiguió despejar el cabezazo del argentino, pero tras el posterior córner y con una prolongación de Lenglet, el propio Julián convirtió el 0-1 antes del primer minuto de juego.
A los 5 minutos de partido La Araña le devuelve el favor al Antoine, que no se arrugó para hacer el 0-2 en un contragolpe de libro. El Atleti comenzó como un cohete el encuentro, y presentó con muchísima seriedad su candidatura a esta Copa del Rey.
Ferrán Torres gozó, poco después, de una ocasión que difícilmente pudo ser más clara. El valenciano se plantó delante de Musso, hoy portero colchonero, con todo el tiempo del mundo para definir con su pierna derecha, pero el guardameta le ganó la partida con una buena parada.
El Barcelona se desató a partir del minuto 19. El actual líder de LaLiga, tras un largo periodo de dominio del esférico, consiguió mediante un pase atrás de Jules Koundé, recortar distancias, cortesía de Pedri.
Tan solo 1 minuto después, y de córner, Pau Cubarsí remató como todo un veterano al fondo de las mallas de la portería colchonera para poner el empate en el marcador (2-2).
Los locales disfrutaron de mucho dominio en campo rival, sometiendo a los de Simeone como si de un equipo juvenil se tratara.
El Atleti trató de construir el juego desde abajo, pero la presión alta propuesta por Hansi Flick hizo que el pase atrás fuera la única opción de salida de balón para la defensa atlética.
Así se presentó el encuentro, que más allá de decepcionar, deleitó al espectador neutral con 4 goles en 20 minutos.
En el minuto 31 El Tiburón volvió a ser protagonista en una acción clara. Tras un robo de balón en campo contrario y un gran regate a Musso, el delantero culé no estuvo ágil al encontrarse con la puerta vacía, y propició un disparo mordido que la defensa visitante pudo tapar.
El dominio culé tras el empate fue atosigante, y puso de cara una eliminatoria que, muy probablemente, más de uno ya vio perdida en los primeros minutos.
Lamine comenzó a hacer lo que quiso con Javi Galán, y tras un caño de escándalo, provocó el enésimo saque de esquina culé.
De nuevo, a centro de Raphinha y con un balón al segundo palo, el Barcelona se puso por delante en el encuentro. Golazo, esta vez de Íñigo Martínez, para hacer el 3-2 con el que nos iríamos al descanso.
El fantástico inicio del Atlético de Madrid hizo pensar que este partido sería un auténtico atropello, y la primera parte lo fue, pero por parte del Barça, que se supo rehacer de un 0-2 inicial.
SEGUNDA PARTE
Sin cambios en los onces, el Barça puso el balón en juego.
El Atleti, de la mano de un Julián y un Giuliano Simeone enérgicos, trató de buscar por activa y por pasiva el empate.
A punto estuvieron de conseguirlo, y es que la leyenda Francesa, Antoine Griezmann, se fue solo en dirección a la portería de su exequipo, pero un remate forzado sumado a una gran parada de Szczęsny fueron suficiente para impedir el gol del delantero galo.
Diego Simeone dio paso en el 55′ a Lino y Reinildo por Giuliano y Galán, buscando dar consistencia al equipo.
Las ocasiones se comenzaron a intercambiar como si de un partido de Premier League se tratara. El Barcelona de la mano del mago canario y el Atlético impulsado por la araña, regalaron uno de los mayores espectáculos de la temporada 2024/25 hasta la fecha.
El hombre que más puntos ha dado al equipo de la capital esta temporada, Alexander Sørloth, salió en sustitución de Griezmann en el 68′.
Poco a poco los catalanes se volvieron a hacer dueños del esférico, y a sabiendas de que la vuelta se juega en el Metropolitano, Hansi Flick sacó del banquillo a Robert «Lewangoalski«, buscando ampliar su ventaja en el marcador.
En el minuto 73, y tras una gran jugada de Lamine el línea de fondo, el de Mataró puso el balón en bandeja para que Lewan marcara el 4-2 en el partido.
El dominio culé tras el cuarto tanto propició los «olés» en la grada de Montjuïc, que no se podía creer la remontada de su equipo.
Poco duró la alegría en el estadio olímpico, y es que, tras una gran jugada de Julián y un mejor pase de Correa, Llorente desde fuera del área mandó el balón al fondo de la portería blaugrana, lo que supuso el 4-3 y el séptimo gol en un partido para el recuerdo.
El ex del City fue la luz al final del túnel para Simeone, y es que pese a la derrota momentánea de su equipo, lo del argentino es para darle de comer aparte (en el buen sentido).
Su compatriota, Ángel Correa, desaprovechó en el 87′ lo que podía haber sido el empate. El argentino falló un mano a mano frente al arquero polaco del Barcelona en unos instantes en los que los rojiblancos, hoy con equipación gris, fueron muy superiores.
¿Recuerdan ustedes quién es futbolista que más puntos ha dado al Atlético de Madrid esta temporada? Pues sí, Sørloth en el 93′ marcó para sellar el empate de su equipo, que supo sufrir y sacar un resultado más que positivo en la ida de las semifinales de la Copa de su Majestad el Rey. Como diría el aficionado colchonero: «Nunca dejes de creer«.
PORRA PARA LA VUELTA
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«El éxito no es un destino, es un proceso continuo de mejora» (Fernando Alonso)
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