El Tenerife vence a un Zamora que murió con honores
Caía la noche en Zamora y los focos del estadio Ruta de la Plata rompían con la oscuridad que reinaba en la ciudad. Zamora y Tenerife, 2.094 km. de distancia, pero unidos en el 104×70 para luchar por el mismo objetivo, seguir vivos en la Copa del Rey.
Ni el frío, ni los horarios evitaron que más de 2.700 valientes acudieran al estadio a alentar a los hombres de Juan Sabas.
Tras un partido lento y de escasas ocasiones los conjuntos llegaban a la prórroga para desgracia de aquellos trabajadores cuyo despertador sonara especialmente pronto la mañana siguiente. El Zamora volvió a otorgar una vida extra al Tenerife
Altube (5,5): Inseguro con el balón en los pies y un tanto desacertado en los envíos largos.
Aleix Gorjón (7): Acertado en la toma de decisiones las pocas veces que se prodigaba en ataque.
Carlos Gutiérrez (6): Dubitativo en duelos y desordenado defensivamente en los primeros compases del encuentro. Ausente en el área en la más clara de los tinerfeños.
José Carlos (6,5): Ordenado y aseado en salida de balón, no tuvo demasiada influencia en el juego en los más de 60 minutos que estuvo sobre el verde.
Carlos Ramos (6,5): Con menos presencia de la que le gustaría, pero rozó el primero en
Guille Macho (7,5): Siempre bien colocado, jugando a dos toques y aportando siempre una línea de pase en salida de balón. Condicionado desde bien pronto por una amarilla cuestionable.
Mancebo (5): Muy participativo, cayendo a zonas intermedias y obligando a su par a saltar líneas. Erró a portería vacía la más clara del encuentro. Se marchó al banquillo tras un partido discreto marcado por el fallo de cara a puerta.
Kike Márquez (7,5): Brillante, mejorando la jugada cada vez que el esférico rondaba su rango de acción. Dejando destellos de crack. Pudo coronarse en el último suspiro, pero el travesaño le arrebató la gloria.
Karlo (7,5): De sus botas nació la mejor acción del Zamora, ganó línea de fondo tras varios recortes y sirvió en bandeja de plata una asistencia que Mancebo no lograría embocar.
Joel Priego (7): Sin retrovisores, vertical cada vez que recibía la pelota. Se vio obligado a hacer la guerra por su cuenta en más de una ocasión, pero supo salir con éxito.
Julen Castañeda (6): Sin pena ni gloria, no sale en la foto de ninguno de los acierto, pero tampoco de los errores.
SUPLENTES:
Fermín:
Sergio Nieto (6): Demostrando el criterio defensivo que le caracteriza y dejando pinceladas en ataque en forma de balones al espacio.
Clavería:
Adrián Bolo (7): Contundente, una participación limpia y sin fallos reseñables.
Dani Hernández:
Rufo:
Roni (5): Intrascendente de principio a fin en su actuación previa a la prórroga, el juego del Zamora estuvo alejado en todo momento de sus botas.
Tresaco (8): Estuvo cerca de desatar la locura en el Ruta de la Plata con una de sus ya míticas cabalgadas. Diferencial cada vez que recibía con metros por delante. El único que no cesó en los intentos de ser vertical.
Campabadal (7): Cargando zonas de finalización, rozó la meta rival con un pase a la red desde la frontal de área. Se encontró con una tarjeta amarilla al poco de ingresar en el terreno de juego.
Luis Rivas:
Director de Agente Libre.
«La pelota no se mancha».