Análisis Atleti-Lille: una derrota impotente

El Atlético de Madrid perdió 1-3 el partido contra el Lille cuando empezó poniéndose por delante. Esto le coloca 27º en la clasificación de la Champions League

Variación táctica del Cholo

Ya es costumbre esta temporada que el conjunto de Madrid varíe tácticamente respecto a otros partidos anteriores. El esquema de este partido era claro: una especie de 4-3-2-1, el llamado `árbol de Navidad´. Este sistema ya funcionó en el partido venidero frente al Leganés que hizo que el Atlético acabara remontando. 

Griezmann y Julián Álvarez actúan de mediapuntas por detrás de Sorloth, cada uno con sus características y funciones. En el centro del campo, Gallagher cubría la parte izquierda, Koke hacía de pivote y De Paul por derecha incorporándose al ataque junto con Nahuel. Javi Galán actuaba como lateral puro subiendo en ciertas ocasiones y defendiendo a veces como tercer central. Está empezando a calar en la pizarra de Simeone.

Es un partido en el que, a pesar de la derrota, los brotes verdes y lo poco positivo se puede sacar precisamente del análisis táctico. Este surgió efecto con buenas incorporaciones de Julián y Griezmann que acabaron dando el gol local, entre otras cosas.

Cara y cruz: Griezmann y Sorloth

En una noche para el olvido por el resultado, la cosa podría haber sido bien distinta si se hubiera acertado. Alexander Sorloth pudo hacer de un encuentro fatídico, una experiencia más habitual cuando se trata de jugar en el Metropolitano. Esto es así porque falló esas ocasiones para las que se le fichó, y acabó afectando de manera directa al resultado.

El noruego se fue con una estadística de 0.94 en goles esperados, lo que quiere decir que por sus llegadas y la calidad de estas, se tendría que haber sumado un tanto al sumario del Atlético de Madrid por su parte. Esta estadística se queda casi corta si se va a la claridad que tenían esas ocasiones en las que uno supone que debería haber anotado.

Sin embargo, su compañero galo, Antoine Griezmann, sí que contribuyó a dar la vuelta a la situación y el resultado se presentó injusto en comparación con su rendimiento. Jugando en esa ya mencionada mediapunta, fue el `hombre libre´que ayudaba a sacar el balón jugado apareciendo de sorpresa y conectando las distintas zonas del campo.

De la esperanza a la debacle

Comenzado ya el segundo tiempo, y con una primera parte muy esperanzadora, el aficionado colchonero se olía una victoria segura como local en competición europea. El inicio de los 45 minutos fue bueno, con el Atleti en línea alta presionando y con el Lille sin saber a qué agarrarse para sacar el balón combinando. En ataque, faltaba algo más de atrevimiento para realizar pases más arriesgados; así como los tiros, que se resistían a hacerse hasta que fueran `seguros´. 

El único recurso que los franceses encontraban para jugar, era dar el esférico a Zhegrova. El kosovar fue precisamente el que puso el empate en el marcador con un obús que no pudo parar Oblak. A partir de ahí el Atleti no se encontró hasta que se dieron los cambios, pero para entonces los visitantes ya iban por delante después de que se perpetrara uno de los mayores escándalos vistos en la `era VAR´, con un penalti que nadie supo explicar. 

Giuliano y Lino salieron eléctricos y con instrucciones de ser más diagonales en dirección a portería por la urgencia del marcador. Cuando parecía que podía llegar un último milagro que diera al menos un punto por el asentamiento de los incorporados al campo, Jonathan David puso el tercero y sentenció el partido.

El resultado deja al conjunto de Diego Pablo Simeone en una situación realmente crítica para pasar directamente a la fase eliminatoria clasificando entre los ocho primeros. No solo por los puntos, sino también por el terrible goal average que dejan las dos derrotas en Champions.

Escrito por Julio Vos Macías.

Julio Vos Macias

Redactor en Agente Libre y estudiante de periodismo en la Universidad Complutense de Madrid.