Alemania parte con el cartel de favorita ante una Dinamarca que siempre puede dar la sorpresa. El Signal Induna Park será testigo de este choque de los octavos de final.
La vida empieza estar en juego. Un partido malo y te ves fuera de esta Euro. Llegó el momento de la verdad para todos estos combinados que buscarán poner el nombre de su país en los cuartos de final.
Anfritriona y favorita
Alemania, con lo que esto siempre da, juega en casa, en su gente. La presión es doble. Las favoritas siempre tienen ese punto de vértigo por su posición que, a veces, perjudica y, por otro lado, jugar en casa y buscar no decepcionar aumenta este sentimiento. Sin embargo, los de Nagelsmann llegan tras un momento de dudas tras el empate ante Suiza que hizo que bajasen los pies a la tierra después de dos jornadas de fantasía. Con el gol de Füllkrug en el 92′, los alemanes pudieron conseguir su objetivo y ser primera de grupo.
Dar la campanada
Dinamarca se enfrenta a una de las favoritas, por eso, busca ser el underdog de esta Euro. Después de ser una de las sorpresas de la anterior edición (llegó hasta semifinales), han bajado el nivel este año aun así. Aún no ha conseguido ganar un partido en esta Euro, tras empatar los tres partidos de fase de grupos, aún así ha conseguido ser segunda. Con todo, los daneses pueden ponerle las cosas complicadas a los alemanes.
Jugadores clave
Alemania es una selección plagada de estrellas y jugadores de altísimo nivel pero donde hay nombres que sobresalen. Jamal Musiala lleva dos goles y está maravillando a todo el mundo con su nivel en la mediapunta. Es capaz de hacer girar y volar a Alemania para buscar la portería contraria. Jamal está siendo el principal abanderado de esta selección en ataque. Siempre escudado por Toni Kroos, un jugador que da sentido a todo lo que pasa en el campo. El veterano centrocampista es la brújula del equipo de Nagelsmann, todo pasa por sus botas. Sin embargo, siempre hay que guardarse un as bajo la manga. Cuando el plan A no sale bien, siempre hay que tener un plan B: Niclas Füllkrug. El ariete es experto en salvar los muebles desde el banquillo. Ya se vio ante Suiza. Un delantero fuerte, poderoso y que va muy bien por arriba puede ser una baza para la anfitriona cuando las cosas se pongan negras.
En el combinado danés no pasa por su mejor momento pero, su líder, siempre está a la cabeza de este combinado. Eriksen lidera el juego del equipo de Hjulmand desde la sala de máquinas siempre junto a Hojbjerg. Los dos forman un doble pivote donde el primero pone la calidad con balón y el segundo la garra y la intensidad para hacerse con ese balón. Arriba encontramos a Hojlund, que aun no vio puerta, pero que lo que ofrece es mucho más. Fija a centrales, guarda la pelota, es fino en los apoyos pero, como dicen, los delanteros viven del gol. Si consigue romper la sequía, Dinamarca podrá estar más cerca de dar la campanada.
Estudiante de periodismo
Redactor en Vavel y en Agente Libre