El Barcelona supera su prueba de fuego particular y manda al Nápoles de vuelta a Italia sin recompensa europea, en un encuentro donde los de Xavi tuvieron que sufrir en varios tramos las acometidas del equipo italiano
Primera parte
El conjunto catalán afrontó el encuentro con la intensidad y actitud correspondientes. Desde el minuto 1 del partido, el equipo de Xavi supo encontrar las costuras napolitanas. El equipo visitante no fue capaz de responder a la alta presión en salida del conjunto blaugrana, y fue rápidamente castigado. El primer tanto llegó tras una buena transición finalizada por Fermín Lopéz, que fue asistido por Raphinha en el minuto 15.
Acto seguido, el equipo catalán mantuvo el pie en el acelerador y metió la directa para buscar el segundo tanto. Tras una positiva conducción de Lamine Yamal por dentro, el joven internacional conectó con Raphinha que estrelló la pelota en el palo. Por suerte para los culés, el balón quedó rechazado para un Joao Cancelo, que a placer convirtió el segundo gol de la noche. Sin embargo, las dudas que llevan acompañando al Barcelona varios años en Europa resurgieron, y se reflejaron en el tanto de Rrahmani que devolvió la tensión a las gradas de Montjuic.
Segunda Parte
La segunda parte se convirtió en un auténtico calvario para los culés. Con un Nápoles dispuesto a dejarse la piel, el conjunto de Xavi se vio sumamente atosigado por la repentina ola de ocasiones de los visitantes. Los primeros 15 minutos del segundo tiempo se caracterizaron por la poca consistencia del Barça en la gestión de balón. Sin apenas poder mantener la posesión, el equipo de Xavi sufrió lo que no está escrito.
A partir del minuto 60, el Barcelona recuperó la batuta del juego, generando varias ocasiones que se toparon con un inspirado Meret. El partido pudo haberse convertido en un ida y vuelta, sin embargo el destino sonrió a los azulgranas. Con un fabuloso pase filtrado de Gundogan en la frontal del área, Sergi Roberto se encontró solo frente a un portero italiano, que se limitó a acompañar con la vista el pase de la muerte del catalán hacia Robert Lewandowski.
Puntuaciones
Criterio de calificación: 0-3. Desastroso/ 4. Mal / 5. Aprobado raspado / 6. Bien / 7. Notable / 8. Muy bien / 9. Fantástico / 10. Excelente / NC. No Calificable.
Ter Stegen: 7. Oportuno. Las veces que tuvo que aparecer, fue decisivo. Especialmente desviando el cabezazo de Di Lorenzo en el primer tiempo.
Koundé: 7. Correcto. A pesar de las duras críticas recibidas a lo largo de la temporada, el defensor francés sigue demostrando una clara mejoría acompañada de una toma de decisiones más que correcta.
Araujo: 7. Serio. Aunque opacado por su joven compañero de la zaga, el defensor uruguayo supo mantener a raya en la mayoría de ocasiones los desmarques de Oshimen.
Pau Cubarsí: 9. Imperial. Perfecto al corte, mejor aún en salida de balón. Sus grandes intercepciones defensivas, se sumaron a sus desplazamientos de 20 o 30 metros con una precisión de cirujano. Sin ningún lugar a dudas, el MVP de esta vuelta de octavos.
Joao Cancelo: 6. A pesar de su tanto, el portugués estuvo más precipitado de lo usual. En fase ofensiva supo incorporarse, aunque con dificultad por el constante dos contra uno orquestado en contra del lateral luso. La toma de decisiones en metros finales el día de hoy, fue su talón de aquiles.
Christensen: 6. Poco participativo. Estando limitado a las coberturas defensivas, el seudopivote danés no pudo aportar gran cosa en la construcción de juego, hecho que penalizó al equipo en la segunda parte.
Gundogan: 7. Jerárquico. Aunque sufrió en fase defensiva, al no poder mantener el control del balón durante todo el partido, en el momento que más quemaban las botas el alemán filtró un gran pase que significó la sentecia azulgrana.
Fermín López: 8. Valiente. Hizo lo más difícil, abrir la lata. Con una actitud supelrativa el canterano supo suplir la esencia del lesionado Gavi.
Lamine Yamal: 7. En su línea. Aunque supo desbordar en distintos momentos del encuentro, el internacional español se desconectó cuando el ritmo ofensivo del Nápoles acusó la fragilidad blaugrana.
Raphinha: 7. Insistente. El internacional brasileño participó en dos de los tantos de los de Xavi. Su gran defecto, la precisión. A pesar de su indiscutible entrega le faltó entender los ritmos del partido como a muchos de sus compañeros.
Lewandowski: 6. Flojo. Su inexactitud y poca presencia se notaron. Sin embargo, el polaco sentenció el partido, aunque a placer. De esta forma ratifica su buena racha goleadora.
Sergi Roberto: 8. Revulsivo de calidad. Entró y supo tomar siempre la decisión más óptima. No se excedió en florituras y fue clave en el tanto que selló el pase de los azulgranas.
Oriol Romeu: NC
Joao Félix: NC
Sergio De la Cruz Ermakof, estudiante del grado de periodismo en la Universitat de València