Análisis del partido del Atlético de Madrid contra el Sevilla en Copa del Rey, con el que consiguieron su pase a semifinales de la competición española
Atléticos y sevillistas se enfrentaron la noche de ayer en el Metropolitano en cuartos de final de Copa del Rey. Los colchoneros vencieron por 1-0 al Sevilla con un gol de Memphis Depay tras una jugada brillante y típica del bueno de Angelito Correa. Con este solitario gol, tras un partido a medio gas por parte del conjunto colchonero, el Atleti consiguió el pase a semifinales de Copa.
La primera parte
El partido no fue de los mejores de la temporada para ninguno de los dos equipos, y para el aficionado, sobre todo la primera parte, fue un poco soporífera. El Atleti parecía bastante cansado y no lograba encontrar un hueco en el 5-3-2 de Quique Sánchez Flores, lo que hizo que la primera parte pareciese un duelo para ver quién defendía mejor al rival.
Una circulación de balón muy bien ejecutada por el Atlético de Madrid llevó a que el Sevilla cometiese un penalti bastante claro sobre Molina cuando se iba solo hacia la portería con el balón. Griezmann tiró el penalti a las nubes al resbalarse al disparar, y no tuvo su mejor día.
Segunda parte
El Atleti llego mucho más a portería y con mucha más insistencia que en la primera parte, tuvieron mayor posesión y dominaron al Sevilla en todo momento, pero algo no funcionaba y algunos jugadores parecían realmente cansados.
La entrada de Marcos Llorente y Barrios dieron alas al equipo en las transiciones y en el tema físico, y el cambio poco esperado de Griezmann por Correa y Morata por Memphis supuso el primer y único tanto del conjunto colchonero.
Simeone acertó al ver los problemas del equipo y solucionarlos de forma rápida, quitando a Griezmann por un Correa que iba a dar al equipo un regate más rápido y mayor explosividad en el área, sacando a Depay para sumar potencia y gol, y a Barrios y a Llorente para dar más velocidad y tranquilidad a la hora de tener el balón.
Los ‘Cholo-Cambios’
Si hay algo que define a los buenos entrenadores y nos enseña porque nosotros, las personas normales y corrientes, no podemos serlo, es por las cosas que hacen que tú no le encuentras el sentido. Una de estas cosas son los cambios del Cholo, siempre criticados y poco entendibles para la mayoría de mortales, pero que acaban saliendo a la perfección la mayoría de las veces.
Ayer el estadio se quedó mudo cuando vio que el cuarto árbitro mostraba el número 7 en rojo y el 10 en verde, y empezaron a sonar murmullos con tono preocupantes al no saber como iba a desarrollarse el partido a partir de ese momento.
Pero el Cholo siempre lleva la razón, hasta cuando no la tiene, y ayer fue otro día más donde se demostró que siempre ve algo que los demás no podemos ver, como aquel cambio de Felipe por Joao en el Metropolitano contra el Valencia tras ir perdiendo por 0 a 2, o en Anfield cuando entró Marcos Llorente por Diego Costa.
En resumen, al César lo que es del César.
Periodista.
Especializado en el Club Atlético de Madrid.