El presidente de telefónica rescató al Real Zaragoza de la desaparición
Cesar Alierta ha fallecido. Eran las palabras que se repetían en el entorno nacional, en el día de ayer. El expresidente de Telefónica, quien sufría problemas cardiovasculares- concretamente una neumonía- abandonaba la vida a los 78 años. Durante las horas posteriores, las redes se llenaron de muestras de afecto hacía la familia y no fue hasta la noche cuando arrancaron los primeros recuerdos. En el programa de Antena Aragón, Que Me Estas Contando, se recordaba la figura de Cesar Alierta y el papel fundamental que tuvo en el futuro del Real Zaragoza.
Al filo de la desaparición
Corría el verano de 2014 y el Real Zaragoza sufría su peor momento a nivel económico. La vida de la entidad estaba en el filo de la navaja y el tiempo se acababa sin una solución. El Real Zaragoza acumulaba una deuda millonaria, concretamente 140 millones de euros– a día de hoy se sigue pagando- y el gran culpable, Agapito Iglesias, quien había soterrado la economía del club, estaba dispuesto a terminar su cometido. El constructor soriano se había repartido más de 14 millones de euros en dinero negro-actualmente, la Fiscalía pide hasta cuatro años de prisión- y la deuda del club se había multiplicado desde los 40 millones. Con este devenir económico y el descenso consumado, el Real Zaragoza vivía sus últimos días de vida.
Cesar Alierta y la Fundación 2032
En los últimos días del concurso de acreedores apareció la última esperanza del club. Se presentaba el proyecto de la Fundación 2032, que finalmente salvó las arcas y saneó las cuentas para sobrevivir. En la presentación-a cinco días del día límite- Sainz de Baranda, sobrino de Cesar Alierta y Petón promulgaban el proyecto. El gran problema era la inyección de capital.
Además del proyecto, la masa social, quien llevaba varios años protestando contra la deriva del equipo, no se quedó de brazos cruzados. Unos días antes, se había organizado una manifestación para intentar cambiar el rumbo, la fecha era el 17 de Julio. La manifestación se iba a producir y desde los intermediarios representantes de la Fundación 2032 en la compra venta, se mandaba tranquilidad. Roberto Bermúdez de Castro manejó la figura de Agapito y no tuvo problemas con la protesta. Solamente, faltaba un comprador.
«Mi padre no me lo perdonaría»
La manifestación fue un éxito. Cerca de 20.000 personas marcharon desde la Plaza del Pilar hasta la Romareda. Estaba clara la posición de la afición, sin embargo, no sabían el futuro de su club. Durante esos días se produjo la llamada que salvó a la entidad. El destinatario era Cesar Alierta.
El zaragozano tuvo tres amores en su vida: Zaragoza, su difunta mujer, Ana, y el Real Zaragoza, inculcado por su padre. El padre de Cesar Alierta, Cesáreo, creó los cimientos de la entidad en Primera División. Cesáreo inyectó el capital necesario para la llegada de los Cinco Magníficos y los primeros títulos deportivos. Y es que la Historia se repite.
Alierta no lo dudó y en la primera llamada afirmó su interés y el de su familia: » Mi padre no me lo perdonaría», declaró Alierta años más tarde. Finalmente, el Real Zaragoza resistió y la deuda se ha reducido a los 40 millones . Pero el Real Zaragoza sigue existiendo gracias a Cesar Alierta y a la memoria de su padre, Cesáreo Alierta.
Autor: Luismi Serrano
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