Día de reyes con derbi burgalés

El día de Reyes nos espera en Burgos un duelo apasionante en la categoría de plata del baloncesto español. El Club de Baloncesto Tizona recibirá en el Plantío al San Pablo Burgos. El conjunto de Diego Ocampo llega de perder fuera de casa ante HLA Alicante. Por otro lado el San Pablo Burgos necesita una victoria como el comer tras ser derrotado por Estudiantes en casa y Gipuzkoa en Donosti.

Los locales vienen de realizar un inicio de campaña muy bueno, porque pese a ser unos de los recién ascendidos están a tan solo dos victorias de los líderes. Además es uno de los equipos que más anota con apróximadamente 88 puntos por partido. Se colocan quintos en la clasificación solo por detrás de los cuatro equipos con más expectación de la categoría: Estudiantes, San Pablo Burgos, Leyma Coruña y Gipuzkoa Basket. Las tres principales armas ofensivas del equipo son Joseph Cremo, Dídac Cuevas y Gerard Jofresa. El primero y el tercero destacan por su tiro exterior, mientras que Dídac, además de aportar puntos, es uno de los mejores pasadores de la liga.

Por otro lado, los de Lolo Encinas, están cumpliendo expectativas y pelean por el ascenso directo. Formados por un núcleo de veteranos y nobeles tan solo acumulan tres derrotas en estos primeros quince partidos. Se reforzaron muy bien en verano y son uno de los equipos más completos de Leb Oro. Son una de las mejores defensas de la liga, que, ofensivamente no se queda atrás. Como principal arma ofensiva tienen al esloveno Miha Lapornik, que roza los 14 puntos por partido, pero hasta otros 8  jugadores están cerca del doble dígito por partido.

El de mañana será el segundo enfrentamiento de su historia tras la Copa Castilla y León de la pasada pretemporada, en la que los visitantes se impusieron 87-78 tras un gran tercer cuarto. Pero este enfrentamiento va más allá de lo deportivo. Tras la desaparición de Tizona en 2015, el San Pablo Burgos compró la plaza de Leb. Después de la refundación, Tizona ha vuelto esta temporada al baloncesto profesional de donde nunca debió irse. Se espera un ambiente caldeado, pero siempre con respeto, a las orillas del Arlanzón donde se ubica el pabellón municipal del Plantío.

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