El canterano valencianista encara diciembre con la esperanza de tener sus primeros minutos en la temporada
Alberto Marí llega al último mes del año con un objetivo entre ceja y ceja: volver a jugar. El delantero alicantino lleva desde la temporada pasada sin disputar ni un sólo minuto debido a la lesión que sufrió el pasado 27 de julio en uno de los entrenamientos de pretemporada del Valencia CF. La lesión en cuestión se produjo en el músculo recto femoral del cuádriceps derecho. Cuatro meses después, Alberto Marí ha vuelto a tocar balón y esta semana ya ha completado la mayoría de entrenos junto a sus compañeros.
La recuperación de Marí está siendo lenta y difícil. De hecho, el pasado septiembre sufrió un contratiempo que ralentizó un poco más su vuelta a los terrenos de juego. El problema fue una dehiscencia de sutura ya que le saltaron los puntos de una cicatriz. Concretamente, el tiempo de demora que supuso este inconveniente fue de dos semanas. Podría haber ido a más si la zona se hubiera infectado pero, afortunadamente, eso no ocurrió.
Marí, importante en la salvación del Valencia
Alberto Marí irrumpió en la plantilla che la temporada pasada, igual que lo hicieron los Javi Guerra, Diego López o Cristhian Mosquera. Ante la complicada situación, Baraja hizo de la necesidad virtud y subió del Valencia Mestalla al primer equipo a una gran camada de futbolistas que, además de salvar al Valencia del descenso, siguen marcando las diferencias a día de hoy en el cuadro valencianista.

En cinco partidos que disputó la temporada pasada en LaLiga, el delantero nacido en Alicante marcó uno de los goles más importantes de la recta final del campeonato para el Valencia. En la jornada 34, el Valencia visitaba Balaídos en su lucha por evitar descender. En un partido muy igualado contra el Celta de Vigo, Alberto Marí terminó decantando la balanza del partido hacia el lado che en el minuto 88 con un cabezazo inapelable. De esta manera, los entrenados por Baraja regresaban de tierras gallegas a la capital del Turia con tres puntos bajo el brazo que sabían a oro.
La alternativa a Hugo Duro, Diego López y Yaremchuk
Este año, las opciones del Pipo Baraja en la delantera están pasando por Hugo Duro, Diego López y Roman Yaremchuk. Hasta ahora, los dos primeros están teniendo muchos más minutos que el tercero. Con la vuelta de Alberto Marí, el entrenador vallisoletano suma una nueva alternativa a su ataque, pues contará con cuatro jugadores para dos huecos en la posición de delantero centro.
Actualmente, el pichichi del equipo es Hugo Duro con seis goles en catorce partidos. Este arranque de temporada ha sido mucho mejor para él que la campaña pasada – donde sólo marcó un gol en todo el año – y así lo demuestra su rendimiento. De los seis goles que lleva hasta ahora, tres los ha metido en los últimos cinco partidos. Sin duda alguna, el ex del Getafe es uno de los jugadores preferidos por Rubén Baraja y así lo demuestran sus 13 titularidades. Además, tiene a la afición metida en el bolsillo debido a su compromiso con el club.
Otro que tiene a la afición encandilada es el canterano Diego López. El joven delantero fue clave también en la permanencia que consiguió el Valencia la temporada pasada con goles como el de la última jornada frente al Betis o como el que le marcó al Real Madrid en Mestalla. Esta temporada, su rendimiento está siendo algo más pobre: sólo dos goles en catorce jornadas. Aún así, el asturiano sigue siendo un fijo en los planes de Baraja y acude regularmente a la selección española sub-21.
Roman Yaremchuk no ha caído ni mucho menos de pie en el Valencia CF. De hecho, el ucraniano apenas ha jugado 173 minutos en ocho partidos y todavía no ha podido estrenarse como goleador con la camiseta valencianista. El delantero cedido por el Brujas apenas juega y con la vuelta de Alberto Marí, si no consigue cambiar la dinámica de su rendimiento, lo más probable es que lo haga aún menos.

Estudiante de Periodismo en la Universitat de València.